Las manzanas con queso son un platillo que combina la dulzura natural de la manzana con la cremosidad del queso, creando una mezcla deliciosa y reconfortante. Esta receta tiene raíces en la cocina casera de Estados Unidos, especialmente popular en regiones donde la manzana es un fruto común y el queso procesado forma parte de las preparaciones cotidianas. En distintos países de Latinoamérica, este tipo de postre podría tener variantes similares, aunque no siempre con el queso Velveeta, pero se mantiene la idea de combinar frutas con queso, ya sea fresco o cremoso, en dulces o snacks. Por ejemplo, en México y Venezuela se suelen disfrutar preparaciones donde la manzana o frutas similares se mezclan con quesos frescos como queso crema o queso de mano, adaptándose a los ingredientes locales.