El Whiskey Sour es un cóctel clásico que tiene sus orígenes en la primera mitad del siglo XIX en Estados Unidos. Se popularizó como una bebida refrescante y sencilla, ideal para suavizar el sabor fuerte del whiskey con la acidez del limón y el dulzor del azúcar. En varios países de Latinoamérica, esta bebida es conocida por nombres similares, aunque en ocasiones se adapta con ingredientes locales. Por ejemplo, en México y Argentina también se disfruta bajo la denominación "Whiskey Sour", mientras que en otros lugares puede recibir variaciones en el nombre o en su preparación para ajustarse al paladar regional.
Este cóctel ha sido un favorito en bares y reuniones por su equilibrio entre lo ácido, dulce y alcohólico, lo que lo hace accesible para muchos paladares. Su versatilidad ha llevado a la creación de distintas versiones, entre ellas el "Whiskey Sour II", una variante que mantiene la tradición pero con un toque especial en la preparación.