La salsa griega de ajo, también conocida como Tzatziki, es un acompañante tradicional muy popular en la gastronomía de Grecia y otros países del Mediterráneo. Su origen se remonta a la antigua Grecia, donde el yogur y el ajo se combinaban para crear una salsa refrescante y ligera, ideal para las altas temperaturas del verano. En Latinoamérica, esta preparación puede variar de nombre y presentación, pero mantiene la esencia de una salsa cremosa y fresca que realza sabores en platos como carnes a la parrilla, ensaladas y panes.
En algunos países de América Latina, como México y Argentina, se le conoce simplemente como salsa de yogur con ajo, y suele servirse como aderezo para tacos, empanadas o como dip para verduras. Su versatilidad y sabor hacen que sea una opción saludable y deliciosa que ha trascendido fronteras, incorporándose a diversas culturas gastronómicas con pequeñas variaciones en sus ingredientes.