El pastel de melaza es un postre tradicional muy apreciado en diversas regiones de América Latina y Estados Unidos. Su origen se remonta a épocas coloniales, cuando la melaza era un edulcorante común debido a su disponibilidad y bajo costo. En diferentes países latinoamericanos, este delicioso pastel puede recibir distintos nombres; por ejemplo, en México y algunos países del Caribe se le conoce simplemente como "pay de melaza", mientras que en otras regiones puede variar ligeramente en ingredientes pero mantiene su esencia dulce y rica.
La melaza, derivada del procesamiento de la caña de azúcar o remolacha, aporta un sabor profundo y característico que distingue a este pastel de otros postres. Tradicionalmente, esta receta ha sido un elemento central en celebraciones y reuniones familiares, evocando nostalgia y tradición en cada bocado.
Como preparar pastel de melaza
Para preparar un delicioso pastel de melaza, primero debes forrar dos moldes para pay con masa. Luego, haz bordes rizados en la masa para darle un aspecto atractivo y tradicional.
Combina harina, azúcar, media cucharadita de bicarbonato y manteca en un bol. Mezcla bien hasta obtener una textura de migajas.
Divide las migajas de manera uniforme entre los dos moldes para pay que ya están forrados con la masa, esparciéndolas en capas uniformes para asegurar una cocción pareja.
En otro recipiente, mezcla la melaza clara, una cucharadita de bicarbonato y agua caliente. Esta mezcla líquida será la que le dé la humedad y sabor característico al pastel.
Vierte la mezcla de melaza sobre las migajas en los moldes, asegurándote de cubrirlas bien.
Finalmente, hornea los pasteles a 190 °C durante 40 minutos o hasta que estén cocidos y hayan adquirido un color oscuro y apetecible.
Los ingredientes necesarios para esta receta son: masa para tarta de doble costra, harina, azúcar, bicarbonato de sodio, manteca, melaza clara y agua caliente.