El pastel de café de nuez negra es un postre tradicional que ha acompañado a varias generaciones, especialmente en regiones donde la nuez negra es un ingrediente común. Su origen se remonta a las comunidades del sureste de Estados Unidos, donde la nuez negra crece de manera natural y su uso en repostería se popularizó rápidamente debido a su sabor distintivo y su textura única. En Latinoamérica, aunque el uso de la nuez negra no es tan extendido, este tipo de pastel suele conocerse simplemente como “pastel de nuez” o “bizcocho de nuez” y se adapta con ingredientes locales.
En países como México, el pastel de nuez se disfruta a menudo en celebraciones y festividades, mientras que en Centroamérica se le incorpora en recetas que combinan café con distintos frutos secos. La esencia de nuez negra le aporta una fragancia y sabor especial que lo distingue de otros pasteles de nuez. Esta receta tradicional sigue siendo un favorito para quienes buscan un postre casero, aromático y con un toque delicioso de café y especias.
Como preparar Pastel de café de nuez negra
Para comenzar, prepara la mezcla base del pastel mezclando todos los ingredientes típicos como harina, polvo para hornear, sal, crisco, azúcar, huevos, leche, vainilla y esencia de nuez negra. Esta combinación es la que dará cuerpo y sabor al bizcocho.
Para el relleno, mezcla juntos la mantequilla, azúcar morena, canela y nuez negra. Este relleno aportará textura y un sabor contrastante dentro del pastel.
Una vez que tengas las dos preparaciones listas, extiende la mitad de la mezcla para pastel en un molde plano y alargado, asegurándote de distribuirla uniformemente.
Espolvorea la mitad del relleno encima de la mezcla ya en el molde, creando una capa sabrosa y dulce.
Verter el resto de la mezcla sobre el relleno y luego extender el resto del relleno por encima para formar las capas finales.
Para darle un toque especial y más jugosidad, vierte media taza de mantequilla derretida encima de todo.
Finalmente, hornea el pastel a 350°F (aproximadamente 175°C) durante unos 35 minutos o hasta que esté dorado y al insertar un palillo, éste salga limpio.