El lemon jelly cake es un postre que combina la suavidad de un bizcocho esponjoso con el frescor característico del limón, realzado por una capa de gelatina que aporta brillo y textura. Esta receta tiene sus raíces en la gastronomía estadounidense, donde los pasteles con sabores cítricos son muy populares, especialmente durante la primavera y el verano. Aunque en Latinoamérica no existe un nombre único para esta preparación, se reconoce comúnmente como "pastel de gelatina de limón" o simplemente "bizcocho de limón con gelatina", dependiendo del país. En México, por ejemplo, la influencia anglosajona ha hecho que muchas personas lo conozcan como lemon jelly cake, mientras que en otros países se prefieren términos más descriptivos relacionados con sus ingredientes principales.
Originariamente, este postre surge como una variación del tradicional lemon cake, al incorporar una gelatina de limón para darle un toque más refrescante y visualmente atractivo. La gelatina no solo añade sabor sino que ayuda a conservar la humedad del pastel, haciendo que cada bocado sea suave y jugoso. Esta combinación lo convierte en una opción ideal para quienes disfrutan de postres ligeros y cítricos. Su popularidad se debe a la facilidad de preparación y a la armonía de sus ingredientes, que a la vez son asequibles y accesibles en la mayoría de las cocinas.