El capuchino batido es una deliciosa variación refrescante del tradicional capuchino italiano, una bebida emblemática conocida por su sabor intenso y textura cremosa. Mientras que el capuchino clásico se caracteriza por la combinación de espresso, leche caliente y espuma de leche, esta versión batida incorpora hielo y leche condensada, ofreciendo una experiencia más dulce y fría, ideal para climas cálidos.
En Latinoamérica, este tipo de preparaciones suelen recibir distintos nombres según la región. Por ejemplo, en México y algunos países del Caribe simplemente se le llama "capuchino frío" o "capuchino helado", mientras que en Venezuela y Colombia es común encontrarlo como "capuchino batido" o "capuchino frappé". Su popularidad crece especialmente durante los días de verano, ya que combina la energía del café con una sensación refrescante única.
Esta receta se basa en ingredientes sencillos y accesibles, y a pesar de su simplicidad, logra un equilibrio perfecto entre la intensidad del espresso y la dulzura de la leche condensada, todo complementado con la frescura del hielo triturado. Es una excelente opción para quienes disfrutan del café pero prefieren bebidas menos calientes y más suaves al paladar.