La sopa de pavo continental es una preparación tradicional que invita a disfrutar del sabor y la calidez del pavo en un platillo lleno de texturas y aromas. Su origen se remonta a las cocinas europeas donde el consumo de pavo se popularizó durante las celebraciones y festividades, especialmente en épocas de otoño e invierno. A medida que esta receta se fue difundiendo a través de Latinoamérica, adoptó variaciones según los ingredientes locales y preferencias culturales.
En países como México, Colombia y Venezuela, esta sopa es reconocida como un platillo reconfortante que suele prepararse con restos de pavo asado, dándole un nuevo uso a las sobras con una preparación nutritiva y sabrosa. En distintas regiones de Latinoamérica también se le puede conocer bajo nombres como "caldo de pavo" o simplemente "sopa de pavo", aunque la esencia de la receta se mantiene con una base de caldo, verduras y cremas que enriquecen su sabor y textura.