Los scones son un tipo de panecillo rápido muy popular en el Reino Unido, especialmente asociado con la hora del té. Su origen se remonta a Escocia, donde originalmente se hacían con avena y se cocinaban en piedra caliente. Con el tiempo, la receta se ha ido adaptando y extendiendo por todo el mundo. En Latinoamérica, aunque no son tan tradicionales, los scones se conocen principalmente como 'panecillos' o simplemente por su nombre en inglés, 'scones', e incluso en algunos países se les llama 'bizcochos rápidos'. Cada región puede variar ligeramente en ingredientes o en técnicas, pero la esencia es la misma: un pan pequeño, esponjoso y ligeramente dulce que acompaña bebidas como el té o el café.
En países como México, Argentina o Chile, los scones han ganado popularidad gracias a la influencia de la cocina internacional y suelen servirse en desayunos o meriendas acompañados de mermeladas o mantequilla. Además, los ingredientes pueden variar según la disponibilidad local, agregando frutos secos o frutas deshidratadas para dar un toque especial. Esta versatilidad hace que los scones sean una opción práctica y deliciosa en distintas culturas gastronómicas.
Como preparar Scones súper
Combina harina, azúcar, polvo para hornear, bicarbonato de sodio y sal cuidadosamente.
Incorpora la mantequilla hasta obtener migas finas.
Agrega las pasas de Corinto.
En un tazón pequeño, bate ligeramente el huevo.
Retira 1 cucharada y mezcla con la crema.
Reserva.
Añade la leche agria al huevo restante.
Agrega todo de golpe a los ingredientes secos, mezclando con un tenedor hasta obtener una masa suave y ligeramente pegajosa.
Forma una bola y colócala sobre una superficie ligeramente enharinada.
Amasa suavemente unas cuantas veces hasta que esté suave.
Extiende o aplana hasta 2.5 cm de grosor.
Corta en círculos de 7.5 cm o 6.3 cm.
Coloca sobre una bandeja para hornear sin engrasar.
Pincela la superficie con la mezcla de huevo reservada.
Hornea en horno a 218 grados Fahrenheit durante aproximadamente 15 minutos o hasta que estén dorados y cocidos.
Sirve recién horneados y tibios si es posible.