El pastel de flor de azahar es una exquisitez que tiene raíces profundas en la tradición culinaria del Mediterráneo, especialmente en países como España, donde la flor de azahar es símbolo de pureza y alegría durante las celebraciones de primavera y Semana Santa. En Latinoamérica, esta receta ha adoptado diferentes nombres y variantes según la región: en México se le conoce como "bizcocho de naranja", en Argentina como "torta de azahar" y en Colombia simplemente como "pastel de naranja con esencia floral". La flor de azahar proviene del naranjo y su fragancia aporta un aroma único y delicado que se refleja en este pastel, convirtiéndolo en un postre emblemático para ocasiones especiales y reuniones familiares.
Tradicionalmente, esta receta incorpora tanto la esencia de la flor de azahar como la cáscara de naranja, logrando un balance perfecto entre sabor y aroma. Su popularidad ha trascendido fronteras, adaptándose a los ingredientes locales y preferencias regionales, pero siempre manteniendo la esencia cítrica y floral que lo caracteriza.
