El pollo teriyaki con nueces de pecán es una deliciosa fusión culinaria que combina la tradición japonesa con un toque propio de América Latina. El término "teriyaki" proviene del japonés, donde "teri" significa brillo y "yaki" se refiere a asar o cocinar a la parrilla. Esta técnica se caracteriza por la marinada de carnes en una salsa dulce y salada que incluye salsa de soja, mirin y azúcar. En varios países latinoamericanos, el pollo teriyaki suele adaptarse a los ingredientes locales y puede encontrarse simplemente como "pollo marinado en salsa teriyaki" o "pollo glaseado", reflejando la influencia de la cocina asiática en la región.
En algunos países, como México y Colombia, es común encontrar variantes del plato que incorporan frutas secas o nueces para añadir textura y sabor, lo que ha llevado a la popularidad del pollo teriyaki con nueces de pecán. Esta combinación resalta el contraste entre el sabor dulce de la salsa teriyaki y el toque crocante y ligeramente dulce de las nueces.
Como preparar Pollo teriyaki con nueces de pecán
Para comenzar, combina la salsa teriyaki, jengibre y ajo en polvo en un recipiente. Vierte esta mezcla en una bolsa plástica grande junto con los trozos de pollo. Presiona la bolsa para sacar el aire y ata bien la parte superior. Voltea varias veces la bolsa para asegurarte de que los trozos de pollo queden bien cubiertos con la marinada.
Refrigera la bolsa con el pollo marinando durante 8 horas o toda la noche para que los sabores se intensifiquen.
Una vez listo, saca el pollo de la marinada, reservando el líquido. En un bol aparte, combina el huevo con 2 cucharadas de la marinada reservada y mezcla bien.
En un plato grande, mezcla las nueces de pecán trituradas con la harina. Luego, sumerge cada trozo de pollo primero en la mezcla de huevo y marinada, y después cúbrelo completamente con la mezcla de nueces y harina, asegurando que cada pieza quede bien cubierta.
Coloca los trozos de pollo con la piel hacia arriba sobre una rejilla que esté puesta encima de una bandeja para hornear grande. Esto permitirá que el calor circule y el pollo quede crujiente.
Hornea el pollo en un horno precalentado a 350 grados Fahrenheit durante aproximadamente 50 minutos, o hasta que esté tierno y cocido por dentro.
Deja enfriar un poco antes de servir. Si deseas, puedes refrigerar el pollo durante 4 horas o toda la noche antes de transportarlo. Para llevarlo a un picnic, envuélvelo en papel aluminio y mantenlo en una nevera con hielo para conservar su frescura.
Esta receta rinde para 8 porciones, perfecta para compartir en familia o con amigos.