El pollo crujiente con mostaza es una receta muy popular en varias regiones de Latinoamérica, conocida por su combinación deliciosa entre la textura crocante y el sabor intenso de la mostaza. Su origen se remonta a la influencia europea en la gastronomía latinoamericana, especialmente de la cocina francesa e italiana, donde el uso de mostaza para realzar el sabor es muy común. En países como México, Colombia y Argentina, esta receta recibe distintos nombres pero mantiene su esencia: un pollo jugoso y bien sazonado, cubierto por una capa crocante que lo hace irresistible.
En México, esta preparación puede conocerse como "pollo empanizado con mostaza", mientras que en Argentina suele llamarse "pollo crocante con aderezo de mostaza". Algunas variantes incluyen añadir miel a la mostaza para un toque dulce que complementa perfectamente el sabor del pollo. Sea cual sea el nombre, esta receta refleja la fusión cultural tan característica de la región, combinando ingredientes locales con técnicas culinarias que han trascendido fronteras.