Nabos fritos con mantequilla: Esta receta tradicional tiene sus raíces en la gastronomía casera de varias regiones de Latinoamérica, donde el nabo es un ingrediente común empleado en múltiples preparaciones. Aunque en algunos países es más frecuente referirse a este tubérculo como "chirivía" o "zanahoria blanca", su uso no varía mucho. En México, por ejemplo, el nabo se suele consumir en guisos y caldos, mientras que en países del Cono Sur como Argentina y Chile, se lo conoce más comúnmente como "chirivía". En otras regiones centroamericanas, simplemente se le llama "nabo" y es apreciado tanto en platos tradicionales como en cocina contemporánea. Esta receta, que fusiona la sencillez del nabo con la riqueza de la mantequilla y el toque aromático de la nuez moscada, ofrece un acompañante perfecto y versátil.
Como preparar Nabos fritos con mantequilla
Para preparar esta deliciosa receta, comienza lavando, recortando y raspando las chirivías para asegurar que estén limpias y listas.
Corta las chirivías en piezas uniformes y hiérvelas en agua con sal durante 25 a 30 minutos, o hasta que estén tiernas al pincharlas.
Escurre bien las piezas y déjalas secar para evitar exceso de humedad al freírlas.
Justo antes de servir, calienta la mantequilla en una sartén a fuego moderado y saltea las chirivías hasta que estén ligeramente doradas por todos lados, permitiendo que se caramelicen un poco en su propio azúcar natural.
Es recomendable utilizar una sartén lo suficientemente grande para que las chirivías se cocinen en una sola capa y se doren de manera uniforme.
Finalmente, sazona con nuez moscada, sal y pimienta al gusto, y sirve las chirivías en una fuente para verduras caliente, adornadas con perejil fresco para dar un toque de color y sabor.