Los muffins de melaza son una deliciosa tradición que tiene sus raíces en la cocina colonial de Estados Unidos, donde la melaza era un endulzante común debido a su disponibilidad y coste accesible. Este tipo de muffins se popularizó rápidamente por su sabor profundo y especiado, evocando la calidez de las especias típicas del otoño, como canela y nuez moscada. En diferentes países de Latinoamérica, estos muffins pueden ser conocidos simplemente como "panquecitos de melaza" o "magdalenas especiadas", aunque su preparación y sabor suelen conservar la esencia original, haciendo uso de ingredientes típicos como la melaza y las especias aromáticas.
En regiones como México, Colombia y Argentina, estos muffins se disfrutan como un acompañante ideal de una taza de café o té, especialmente en climas fríos donde sus sabores fuertes y acogedores aportan confort. Además, la posibilidad de refrigerar la masa y conservarla hasta por tres semanas los convierte en una opción práctica para preparar en casa y tener a mano un snack dulce y nutritivo.