La magdalena es un pequeño bizcocho que tiene una rica historia europea, originándose en Francia, donde se cuenta que fue creada por una cocinera llamada Madeleine. En Latinoamérica, estos dulces varían en nombre y preparación según la región, en algunos países se les llama "muffins" o simplemente "panquecitos". En México, por ejemplo, las magdalenas son un postre tradicional que acompaña el café de la tarde, mientras que en países como Argentina y Chile se disfrutan como un snack dulce en reuniones familiares. Esta receta en particular combina ingredientes nutritivos como la avena y la calabaza, dando un toque saludable y otoñal a este clásico que puede ser disfrutado en todas partes, bajo distintas variantes y sabores.
Como preparar Magdalenas de avena y calabaza
Cernir juntos la harina, polvo para hornear, especias para pastel de calabaza, bicarbonato de sodio y sal.
Reservar.
Combinar calabaza, azúcar morena, huevo, leche, aceite, avena y pasas en un tazón.
Mezclar bien.
Añadir los ingredientes secos de una vez, revolviendo solo lo suficiente para humedecer.
Verter la mezcla en los moldes para muffins de 3 pulgadas engrasados, llenando 2/3 partes.
Espolvorear con la cobertura de migajas.
Hornear a 400 grados Fahrenheit.
En el horno de 18 a 20 minutos o hasta que estén dorados.
Servir caliente con jalea o mermelada casera.
Cobertura de migajas:
Combinar 1/2 taza de azúcar morena, 1 cucharadita de harina sin blanquear, 1/4 cucharadita de especias para pastel de calabaza y 2 cucharaditas de mantequilla o margarina regular en un tazón.
Mezclar hasta obtener migajas.