Galletas fáciles de limón para refrigerador son una deliciosa opción de repostería que combina el frescor cítrico con una textura suave y crujiente. Estas galletas tienen un origen sencillo, pues provienen de las recetas caseras tradicionales que muchas familias latinoamericanas han ido perfeccionando con el paso del tiempo. En varios países de Latinoamérica, este tipo de galletas recibe nombres distintos como "galletas de mantequilla con limón", "galletitas de limón" o simplemente "galletas de limón". Su popularidad radica en la facilidad para prepararlas y en la versatilidad del limón como saborizante, que es muy valorado en la gastronomía de la región. Además, al ser una receta para refrigerador, permite conservar la masa para hornear en el momento deseado, lo que facilita la preparación y el disfrute en cualquier ocasión.
Como preparar Galletas fáciles de limón para refrigerador
Para comenzar, procese la ralladura de limón junto con el azúcar en un procesador de alimentos hasta conseguir que la ralladura esté tan fina como el azúcar.
Agregue la mantequilla y continúe procesando hasta obtener una mezcla esponjosa.
Raspe los lados del bol para integrar bien los ingredientes.
Incorpore la harina para pastel, el bicarbonato de sodio y la sal, y procese brevemente solo hasta que todos los ingredientes estén mezclados.
Forme la masa en dos rollos redondos de aproximadamente 1 1/2 pulgadas de diámetro y envuelva cada uno en papel encerado.
Refrigere los rollos hasta que estén firmes para facilitar el corte.
Precaliente el horno a 350 grados Fahrenheit (175 grados Celsius).
Corte cada rollo en galletas de 1/4 de pulgada de grosor y colóquelas en una bandeja para hornear sin engrasar.
Hornee de 8 a 10 minutos, vigilando que los bordes apenas comiencen a dorarse.
Evite hornear en exceso para mantener la textura perfecta.