Las galletas de limón son un delicioso postre que combina la frescura del cítrico con la dulzura y suavidad de una galleta horneada. Su origen está muy relacionado con la tradición de repostería casera que se popularizó en Estados Unidos durante el siglo XX, especialmente con el auge de mezclas para pastel listas para usar, que facilitaron la preparación de postres de manera rápida y sencilla. En Latinoamérica, esta receta ha sido adaptada en diferentes países, donde puede encontrarse bajo nombres como "galletas de limón", "galletas glaseadas de limón" o simplemente "galletas cítricas", dependiendo de la región. En México, por ejemplo, las galletas de limón son muy populares en reuniones familiares y festividades, mientras que en países como Argentina o Colombia, se les suele añadir un glaseado que les da un toque especial y decorativo.
Además, el limón es un ingrediente muy valorado en la gastronomía latinoamericana, no solo por su sabor refrescante, sino también por su capacidad para equilibrar sabores dulces y aportar un aroma inconfundible. Estas galletas se caracterizan por ser tiernas y ligeramente húmedas, con un glaseado que resalta el sabor del limón y aporta un acabado brillante y apetitoso.