Frijoles de San Fernando son una preparación tradicional que tiene sus raíces en la gastronomía del sur de Texas, en Estados Unidos, aunque su influencia tex-mex y mexicana es inconfundible. Su origen se remonta a las comunidades campesinas que aprovechaban ingredientes locales y técnicas de cocción lentas para crear platillos llenos de sabor y carácter. En diferentes países de Latinoamérica, los frijoles se preparan con variaciones similares: en México son conocidos como "frijoles charros", mientras que en algunas regiones de Centroamérica se les llama "frijoles rancheros". Estos nombres suelen hacer referencia a la mezcla de carne y especias que realzan el sabor de los frijoles, haciendo de este platillo una opción popular para reuniones familiares y festividades.
Esta receta destaca por combinar ingredientes frescos y especias, creando una armonía perfecta entre dulce, salado y picante. Además, es una fuente excelente de proteínas y fibra, lo que la convierte en un alimento nutritivo y reconfortante.