Crema quemada de mandarina es un postre que combina la suavidad y cremosidad clásica de una crema quemada con el aroma fresco y cítrico de la mandarina. Este dulce tiene sus raíces en la tradición europea de las natillas y la crème brûlée, a las cuales añade un toque tropical gracias a la mandarina, una fruta muy popular en países de Latinoamérica.
En diferentes países de la región, esta receta puede encontrarse bajo nombres como "natillas de mandarina", "crema catalana de mandarina" o simplemente "crema quemada cítrica". La incorporación de frutas cítricas como la mandarina o la naranja le da un perfil más refrescante y ligero, ideal para climas cálidos y celebraciones familiares.
Su origen se remonta a la influencia europea traída durante la colonización, donde recetas tradicionales se adaptaron con ingredientes locales, como la mandarina, que abunda en la zona. Hoy en día, es un postre muy apreciado por su delicado equilibrio entre dulce, cremoso y ácido.
Como preparar Crema quemada de mandarina
Calienta la crema y la mitad y mitad solo hasta que hiervan a fuego lento.
Retira la ralladura de la mandarina y colócala en la crema.
Déjala reposar durante aproximadamente media hora.
Exprime aproximadamente una cucharada de jugo.
Bate las yemas de huevo hasta que estén claras y vierte la crema caliente sobre ellas mientras bates todo el tiempo.
Agrega la vainilla y cuela la mezcla a través de un colador fino.
Llena los moldes con la mezcla, colócalos en una fuente grande para hornear y llena la fuente con agua caliente hasta una profundidad de 2.5 cm.
Hornea durante unos 40 minutos a 150 grados o hasta que las natillas estén cuajadas.
Continuarán cocinándose después de retirarlas, por lo que aún pueden tener un pequeño movimiento en el centro.
Refrigera completamente.
Tamiza el azúcar morena y coloca una capa ligera sobre cada molde.
Colócalos bajo el asador o, en mi caso, uso un soplete de propano hasta que el azúcar se derrita.
Normalmente divido esta receta por la mitad ya que somos dos.
Si hago esta receta más grande, agrego una yema extra.
