El cordero abierto en mariposa con mantequilla de ajo es una receta tradicional que refleja la riqueza culinaria de diversas regiones, especialmente en países con fuertes raíces pastoriles. Esta técnica consiste en abrir el cordero por la mitad, retirando el hueso central para conseguir una pieza uniforme y plana que permite una cocción pareja y rápida. En Latinoamérica, este corte y preparación también es conocido en algunos países como "cordero a la plancha" o "cordero al espiedo abierto", dependiendo de la región y el método de cocción utilizado.
El origen del cordero abierto en mariposa se ubica en las zonas donde la crianza ovina es una actividad ancestral, como en Argentina, Uruguay, Chile y Perú, donde el asado y las preparaciones con cordero forman parte esencial de la gastronomía local. Su presencia en la mesa es sinónimo de festividad y encuentro familiar. Además, el uso de mantequilla de ajo para realzar el sabor es un toque que proviene de tradiciones europeas, especialmente francesas y mediterráneas, que se han fusionado con ingredientes autóctonos.
En otros países latinoamericanos, el cordero abierto en mariposa puede tener otras denominaciones o preparaciones similares que incluyen marinados con hierbas y cítricos, buscando resaltar el aroma y la suavidad natural de la carne. Estas técnicas reflejan no solo la diversidad gastronómica, sino también la riqueza cultural de la región, donde el cordero juega un papel destacado en las celebraciones y en la cocina cotidiana.
Como preparar Cordero abierto en mariposa con mantequilla de ajo
Para comenzar, abrir el cordero extendido y colocar el lado de la grasa hacia abajo sobre una tabla. Luego, con un mazo para carne o rodillo, golpear el cordero hasta obtener un grosor uniforme, lo que facilitará una cocción pareja.
A continuación, combinar en un tazón pequeño perejil, tomillo fresco, cáscara de limón rallada, ajo, pimienta negra molida y mantequilla. Esta mezcla aromática será la mantequilla de ajo que dará un sabor inigualable al cordero.
Esparcir la mantequilla sobre el lado de la grasa del cordero de manera uniforme. Luego, colocar el cordero en una fuente grande y poco profunda, rociar con jugo de limón por encima, cubrir y refrigerar durante 3 horas o toda la noche para que los sabores se integren perfectamente.
Pasado el tiempo de marinado, colocar las papas pequeñas y cebollas baby en una fuente grande para asar y rociar con aceite de oliva para mejorar su textura y sabor.
Hornear sin cubrir en horno moderadamente caliente durante 20 minutos para comenzar a cocinar las verduras.
Luego, colocar el cordero, con el lado de la grasa hacia arriba, sobre las verduras en la misma fuente para asar. Hornear sin cubrir durante aproximadamente 40 minutos o hasta alcanzar el punto de cocción deseado del cordero.
Retirar el cordero de la fuente y cubrir ligeramente con papel aluminio para mantenerlo caliente mientras se terminan las verduras.
Escurrir los jugos excedentes de la fuente y continuar horneando las papas y cebollas en horno a temperatura muy alta durante otros 15 minutos o hasta que estén crujientes y doradas.
Finalmente, rebanar el cordero y servir acompañado de las verduras asadas, disfrutando de una combinación perfecta de sabores y texturas que harán de este plato una experiencia culinaria inolvidable.
