El bistec empanizado es un plato tradicional que tiene raíces profundas en la gastronomía sureña de Estados Unidos, donde es conocido como "Southern Fried Steak" o simplemente "Country Fried Steak". Su origen se remonta a la influencia de los inmigrantes europeos que adaptaron técnicas de empanizado y fritura a las ingredientes disponibles en su nuevo entorno. En diferentes países de Latinoamérica, este platillo puede recibir nombres variados, como "bistec apanado" en México, "milanesa" en Argentina y Chile, o incluso "chuleta empanizada" en algunas regiones. Aunque el concepto básico de carne rebozada y frita es común, cada país añade su toque particular en condimentos y acompañamientos.
La incorporación de cactus en esta variante del bistec empanizado aporta un sabor único y una textura interesante, fusionando la tradición sureña con ingredientes autóctonos de América Latina, especialmente de México, donde el nopal es un elemento fundamental de la cocina. Esta mezcla de culturas culinarias da como resultado un plato que honra las raíces sureñas mientras celebra la riqueza gastronómica latinoamericana.
Como preparar Bistec empanizado estilo sureño con cactus
Para preparar este delicioso bistec empanizado con un toque sureño y la frescura del cactus, comienza añadiendo la sal sazonada de jalapeño a la harina y mezcla bien para integrar los sabores.
Sumerge cada bistec en la harina sazonada, luego sumérgelo en el baño de huevo y vuelve a sumergir la carne en la harina sazonada, asegurándote de cubrir bien cada bistec para lograr una empanización crujiente.
Calienta el aceite vegetal a aproximadamente 350 grados Fahrenheit en una sartén grande. El nivel de aceite debe ser lo suficientemente profundo para cubrir completamente los bistecs durante la fritura.
Fríe los bistecs empanizados hasta que estén dorados y crujientes. Después, escúrrelos sobre toallas de papel para eliminar el exceso de aceite y colócalos en una fuente caliente cubierta con papel aluminio para mantener su temperatura.
Vierte todo el aceite y jugos de la sartén, dejando solo 2 cucharadas. Agrega 3 cucharadas de la harina sazonada restante y mezcla bien, cocinando a fuego medio y revolviendo constantemente hasta que la mezcla de aceite y harina adquiera un tono dorado, formando un roux.
Retira del fuego y añade la leche y el caldo instantáneo de pollo. Regresa la preparación al fuego y cocina a fuego lento, revolviendo constantemente para evitar grumos, hasta que la salsa espese y adquiera una textura cremosa.
Finalmente, sirve la salsa caliente sobre los bistecs empanizados con cactus, utilizando una cuchara para repartirla uniformemente y disfrutar de esta combinación de sabores sureños y mexicanos.