El pastel de carne es un platillo tradicional que ha acompañado a muchas familias a lo largo de los años, con orígenes que se remontan a la influencia europea, especialmente de Inglaterra y Alemania, donde las mezclas de carne y especias formaban parte fundamental de la cocina casera. En América Latina, este plato ha adoptado variantes propias, incorporando ingredientes tropicales que reflejan la riqueza agrícola de la región. En países como México, Puerto Rico y Cuba, el pastel de carne a menudo se denomina "pan de carne" o simplemente "pastel de carne", mientras que en otros lugares puede encontrarse bajo nombres similares pero con ingredientes característicos de cada zona. La inclusión de elementos como el plátano y la mermelada en esta receta tropical añade un toque dulce y único que distingue a esta versión de las demás, fusionando sabores tradicionales con un perfil caribeño muy especial.