El pan de maíz es un alimento tradicional con raíces profundas en la cultura culinaria de América. Originario principalmente del sur de Estados Unidos, este pan tiene una historia que se remonta a los pueblos indígenas que utilizaban el maíz como base de su alimentación. Con el tiempo, la receta se extendió y fue adoptada y adaptada en diferentes regiones. En Latinoamérica, este tipo de pan se conoce también como "cornbread" en países anglófonos, mientras que en algunas zonas mexicanas y centroamericanas se le llama simplemente "pan de maíz". Aunque las variaciones pueden diferir, la esencia del pan hecho a base de harina de maíz, que aporta una textura crujiente y un sabor característico, se mantiene en todos lados.
En países como Venezuela o Colombia, el pan de maíz tiene versiones que incluyen ingredientes locales y que se comen en distintos momentos del día, desde desayunos hasta acompañamientos para comidas principales. A pesar de estas diferencias, la receta sigue siendo un símbolo culinario de la región, que une la tradición indígena con influencias europeas, y que ha logrado conquistar paladares alrededor de América.