La mantequilla de pera especiada es una deliciosa preparación tradicional que combina el sabor dulce y jugoso de las peras con una mezcla aromática de especias que realzan su sabor. Este tipo de conserva tiene sus raíces en la cocina casera de Europa, donde se solían preparar mermeladas y mantequillas de frutas para aprovechar la abundancia de cosechas en temporada. En América Latina, aunque no es tan común como la mermelada de guayaba o fresa, algunas regiones han adoptado variantes similares que incluyen frutas locales y especias autóctonas.
En diferentes países latinoamericanos, la mantequilla de pera puede recibir nombres variados. En México, se le llega a llamar “dulce de pera” o “ate de pera” cuando la consistencia es más firme, mientras que en países como Colombia y Venezuela simplemente se la conoce como “conserva de pera”. Aunque la receta base es muy parecida, el uso de especias como canela, clavo y pimienta de Jamaica es un toque distintivo que recuerda el legado culinario europeo.
Esta preparación es ideal para disfrutar en desayunos, acompañando panes, galletas o quesos, o incluso como ingrediente en postres más elaborados. Su textura suave y sabor especiado la convierten en un clásico para quienes disfrutan de los sabores tradicionales con un toque especial.
Como preparar Mantequilla de pera especiada
Para preparar esta exquisita mantequilla de pera especiada, comienza combinando las peras peladas y picadas junto con el jugo de manzana en una olla grande de hierro fundido.
Luego, ata las ramas de canela partidas, el jengibre fresco, la pimienta de Jamaica y los clavos en un trozo de tela de queso para crear una bolsa de especias.
Añade esta bolsa a la mezcla de peras y jugo de manzana.
Lleva todo a ebullición, cubre la olla, reduce el fuego y deja que se cocine a fuego lento durante 45 minutos a 1 hora, o hasta que las peras estén completamente tiernas.
Después, escurre las peras y desecha la bolsa con las especias.
Machaca las peras o procesa la mezcla en un procesador de alimentos hasta obtener una consistencia suave y homogénea.
Regresa este puré de pera a la olla de hierro fundido y añade el azúcar al gusto.
Cocina la mezcla sin cubrir a fuego medio durante 30 a 40 minutos o hasta que espese, revolviendo frecuentemente para evitar que se pegue.
Finalmente, retira la olla del fuego y vierte rápidamente la mezcla caliente en frascos esterilizados y calientes, dejando un espacio de aproximadamente 1/4 de pulgada en la parte superior.
Limpia bien los bordes de los frascos para asegurar un buen sellado.
Cubre de inmediato con tapas metálicas y enrosca las bandas firmemente.
Para conservar adecuadamente la mantequilla de pera, procesa los frascos en un baño de agua hirviendo durante 5 minutos.
