Las galletas de avena con chispas de chocolate son un clásico dentro de la repostería casera que tiene sus raíces en las cocinas de Estados Unidos a finales del siglo XIX. Originalmente, estas galletas se preparaban con ingredientes simples y nutritivos, como la avena, que era una fuente accesible de energía para muchas familias. Con el tiempo, la receta se fue popularizando y adoptando variaciones según los gustos locales. En Latinoamérica, aunque las galletas de avena son conocidas principalmente por ese nombre en países como México y Colombia, en lugares como Argentina y Chile también se las llama “galletitas de avena”. La inclusión de chispas de chocolate da un toque dulce y moderno que encanta tanto a niños como a adultos.
Este tipo de galletas son valoradas por su textura crocante y ligeramente masticable gracias a la avena, además de ser relativamente fáciles de preparar. Su popularidad ha trascendido fronteras, adaptándose a diferentes paladares y preferencias, como en la versión sin huevos que permite que personas con alergias puedan disfrutarlas sin problema.
Como preparar Galletas de avena con chispas de chocolate sin huevos
Preparar estas galletas es sencillo y rápido. Primero, bate mantequilla o margarina junto con los azúcares y el extracto de vainilla hasta obtener una mezcla ligera y esponjosa.
A continuación, agrega la harina de trigo y la sal, mezclando bien para integrar todos los ingredientes secos.
Disuelve el bicarbonato de sodio en agua hirviendo y añádelo a la mezcla para ayudar a que las galletas adquieran una textura suave y un buen levado.
Incorpora la avena en hojuelas, las pasas y las chispas de chocolate semi amargo, asegurándote de distribuir bien estos ingredientes para que cada galleta tenga un buen balance de sabores.
Coloca cucharaditas de la mezcla sobre una bandeja para galletas sin engrasar, dejando espacio entre cada porción para que no se peguen al hornear.
Hornea a 350 grados Fahrenheit durante 10 a 12 minutos. Es importante no cocinarlas en exceso para mantener su textura suave por dentro y ligeramente crujiente por fuera.
La receta rinde aproximadamente 3 docenas de galletas deliciosas y perfectas para acompañar cualquier momento del día.
