El chili de verduras es una deliciosa variante del tradicional chili con carne, que tiene raíces en la cocina Tex-Mex y en la gastronomía estadounidense del suroeste. Este platillo es muy popular en México y Estados Unidos, donde se ha adaptado con distintas versiones según los ingredientes disponibles. En varios países de Latinoamérica, este platillo recibe distintos nombres, aunque la esencia se mantiene: un guiso picante y reconfortante hecho principalmente con frijoles y especias. Por ejemplo, en Argentina y Chile a veces se le llama simplemente "guiso de frijoles con verduras", mientras que en Perú se reconoce como una opción vegetariana y saludable dentro de la variedad de sopas y guisos caseros. El chili de verduras es apreciado no solo por su sabor intenso y especiado, sino también por su versatilidad y valor nutricional.
Esta receta es ideal para quienes buscan una preparación fácil, rápida y llena de sabor, perfecta para cualquier época del año, especialmente durante los días frescos en los que se antojan platos caldosos y picantes. El uso de ingredientes frescos y especias tradicionales como el chile en polvo, el comino y el orégano, le aportan un aroma y sabor característicos que reflejan la mezcla cultural de las cocinas del norte de México y el sur de Estados Unidos, a la vez que ofrecen una versión completamente vegetariana.
Como preparar Chili de verduras II
Para preparar este delicioso chili necesitarás ingredientes como aceite de oliva, frijoles rojos, cebolla, chile en polvo, ajo, comino, zanahorias, orégano seco, apio, sal, calabacín, pimienta negra, pimientos rojos, azúcar granulada, chiles jalapeños, queso mozzarella y tomates.
En una cazuela grande de 3 cuartos, combine el aceite, la cebolla, el ajo, las zanahorias y el apio.
Microondas cubierto a alta potencia por 7 a 8 minutos o hasta que las verduras estén casi tiernas.
Agregue calabacín, pimientos, tomates enlatados con su líquido, frijoles kidney con líquido, chile en polvo, comino y orégano.
Microondas cubierto a alta potencia por 16 a 18 minutos o hasta que el calabacín esté tierno.
Deje reposar, cubierto, por 5 minutos.
Sazone al gusto con sal, pimienta y una pizca de azúcar.
Sirva el chili en tazones para sopa calientes.
Espolvoree con queso cheddar rallado o mozzarella y sirva.
