Osso buco es un plato tradicional italiano originario de la región de Lombardía, especialmente de la ciudad de Milán. Su nombre significa literalmente "hueso hueco" debido al corte del jarrete de ternera con el hueso central que contiene tuétano. Este platillo se ha popularizado en muchos países por su sabor intenso y su textura tierna. En América Latina, aunque el término "osso buco" se utiliza comúnmente, en algunas regiones se le conoce simplemente como "jarrete estofado" o "jarrete en salsa", dependiendo de las costumbres locales. Su preparación tradicional incluye cocer la carne lentamente en vino blanco y caldo con verduras y hierbas aromáticas, lo que le da un aroma y sabor característicos. Además, suele acompañarse con gremolata, una mezcla fresca de ralladura de limón, ajo y perejil, que aporta frescura y contraste.
Como preparar Osso buco a la milanesa
Para preparar un delicioso Osso buco a la milanesa, comienza cortando dos jarretes de ternera en trozos de 5 cm.
Reboza los jarretes en harina y saltea en mantequilla a fuego alto hasta que estén dorados por todos lados.
Agrega sal, pimienta, apio, cebolla, zanahorias, champiñones, tomate, salvia y romero para aportar sabor y aroma al guiso.
Reduce el fuego, tapa y cocina a fuego lento durante 10 minutos para que los ingredientes se integren bien.
Incorpora vino blanco y vuelve a tapar, manteniendo la cocción suave durante 2 horas para que la carne quede tierna.
El líquido debe cubrir apenas la carne para asegurar una correcta cocción sin exceso de líquido.
Justo antes de servir, incorpora la gremolada, que consiste en la ralladura de limón, perejil, anchoa y ajo, para aportar un toque fresco y aromático.
Finalmente, sirve el osso buco acompañado de arroz cocido, que complementa perfectamente este plato milanés tradicional.