El aderezo de miel y ajo es una salsa popular que combina sabores dulces y picantes, muy utilizada en ensaladas y como acompañante en diversos platos. Su origen se remonta a la tradición culinaria de Estados Unidos, donde las mezclas de miel y ajo se volvieron populares en la cocina casera y en establecimientos de comida rápida. En Latinoamérica, aunque tradicionalmente se emplean otras salsas, este aderezo ha ganado reconocimiento y diferentes países lo conocen por nombres similares. Por ejemplo, en México es común referirse a él como "aderezo dulce de ajo", mientras que en países como Argentina o Chile se le llama simplemente "salsa de miel y ajo". Esta mezcla aporta un balance perfecto entre la acidez y la dulzura, con el toque distintivo del ajo que realza el sabor.