menudencias de pollo

Menudencias de pollo son las partes internas comestibles del pollo que no incluyen la carne muscular, comúnmente utilizadas en diversas recetas tradicionales y caseras para preparar caldos, guisos, y platos sabrosos y nutritivos. Entre las menudencias más habituales se encuentran el hígado, el corazón, las mollejas y, en algunos casos, el riñón y el cuello.

El uso de las menudencias de pollo es muy popular en muchas cocinas del mundo, especialmente en América Latina, donde forman parte fundamental de recetas como el caldo de menudencias, estofados o incluso frituras. Estas piezas son consideradas ingredientes económicos y llenos de sabor, además de aportar una textura diferente a los platillos.

En cuanto a su origen, las menudencias provienen del pollo doméstico (Gallus gallus domesticus), y su consumo tiene raíces ancestrales en la cocina rural y tradicional, donde se aprovecha al máximo cada parte del animal para evitar desperdicios.

Desde el punto de vista nutricional, las menudencias de pollo son ricas en proteínas, hierro, vitaminas del complejo B (especialmente B12 y ácido fólico) y minerales esenciales, lo que las convierte en una opción nutritiva aunque se recomienda consumirlas con moderación debido a su contenido de colesterol.

En Hispanoamérica, las menudencias de pollo también son conocidas bajo diversos sinónimos según la región, tales como vísceras de pollo, achuras de pollo o simplemente menudos (aunque este último puede referirse a menudencias de otros animales en algunos países).