hueso de cordero

Hueso de cordero es un ingrediente culinario fundamental en muchas recetas tradicionales y contemporáneas. Se trata del hueso procedente del cordero, un animal joven de oveja, cuya carne y huesos son muy valorados en la cocina por su sabor intenso y profundidad en los caldos y guisos.

Origen: El uso del hueso de cordero en la cocina es muy común en diversas gastronomías, especialmente en la mediterránea, la del Medio Oriente, y la latinoamericana. Tradicionalmente, los huesos de cordero se utilizan para elaborar caldos, fondos, sopas y estofados, aportando un carácter único y potente gracias a su contenido en colágeno y médula.

Propiedades: Los huesos de cordero son una excelente fuente de colágeno, minerales como calcio y fósforo, y gelatina natural, que se desprende durante la cocción lenta para dar cuerpo y textura a caldos y salsas. Además, la médula ósea aporta un sabor profundo y untuoso. Desde el punto de vista nutricional, aunque no se consume directamente el hueso, los extractos y caldos preparados con huesos de cordero contienen nutrientes beneficiosos para la salud articular y el sistema óseo.

Sinónimos en español y en Hispanoamérica: Dependiendo de la región, el hueso de cordero puede denominarse simplemente "hueso de carnero" (en países donde se suele usar el término carnero para animales más adultos), o también puede encontrarse referido como "hueso para caldo de cordero". En algunas zonas, también es común llamarlo "hueso de borrego", especialmente en México y el Caribe, donde "borrego" es la palabra habitual para referirse al cordero.

En resumen, el hueso de cordero es un ingrediente imprescindible para enriquecer y dar sabor a numerosos platillos, especialmente aquellos que requieren caldos concentrados y salsas con cuerpo.