helado de menta

Helado de menta es un postre congelado elaborado a base de crema, azúcar y extracto o esencia de menta, que le confiere un sabor fresco y refrescante, ideal para los días calurosos o como complemento dulce en diversas recetas. Su textura cremosa y suave combina a la perfección con otros ingredientes como chocolates, frutas y galletas, siendo muy popular en heladerías y hogares.

Este ingrediente tiene su origen en la combinación tradicional de crema y menta, con raíces que se remontan a la gastronomía anglosajona, aunque hoy en día es apreciado en todo el mundo. La menta utilizada suele ser la Mentha piperita, una planta aromática conocida por sus propiedades digestivas y refrescantes.

Desde el punto de vista nutricional, el helado de menta aporta principalmente calorías provenientes de grasas y azúcares, por lo que se recomienda consumir con moderación. Sin embargo, la menta contiene compuestos que pueden ayudar a mejorar la digestión y aportar un efecto refrescante en la boca, haciendo que este helado sea una opción popular para después de las comidas.

En diferentes países de habla hispana en América Latina, el helado de menta puede encontrarse bajo sinónimos como nieve de menta (México, Centroamérica), granizado de menta (aunque más líquido, en algunas regiones se usa para referirse a postres fríos de menta) o simplemente helado sabor menta. No obstante, el término más común y comprendido en el contexto culinario es helado de menta.