galletas de té

Galletas de té son un tipo de galleta fina, ligera y crujiente, ideal para acompañar infusiones como el té o el café. Su textura delicada y su sabor suave las hacen perfectas tanto para consumir solas como para ser usadas en postres, bases de tartas o acompañamientos en recetas dulces.

Este tipo de galleta tiene su origen en Europa, especialmente en países como Inglaterra, donde la tradición del "afternoon tea" incluye estas galletas como un elemento clásico. Tradicionalmente, las galletas de té se elaboran con ingredientes simples como harina, mantequilla, azúcar y huevo, lo que les confiere un sabor neutro y versátil.

En cuanto a sus propiedades, las galletas de té aportan energía principalmente en forma de carbohidratos, y su bajo contenido en grasas y azúcares comparado con otras galletas más elaboradas las hace una opción algo más ligera para acompañar bebidas calientes. Sin embargo, al ser productos procesados, se recomienda consumirlas con moderación dentro de una dieta equilibrada.

En el mundo hispanoamericano, las galletas de té pueden recibir diferentes nombres según la región, tales como galletitas de té, galletas maría (aunque estas últimas suelen ser un poco diferentes en textura), o simplemente galletas secas. No obstante, el término galletas de té es entendible y frecuente para referirse a esta variedad específica de galletas ligeras y crujientes destinadas a acompañar infusiones.