grasa de cerdo

Grasa de cerdo es una materia grasa de origen animal que se obtiene del tejido adiposo del cerdo. Tradicionalmente, se ha utilizado en la cocina para aportar sabor, jugosidad y una textura crujiente a una amplia variedad de platillos, desde guisos hasta frituras y masas horneadas.

Este ingrediente es especialmente valorado en la gastronomía por su capacidad para soportar altas temperaturas sin humear, lo que la hace ideal para freír y saltear ingredientes. Además, la grasa de cerdo añade una riqueza y profundidad de sabor que no se consigue fácilmente con aceites vegetales.

En cuanto a su origen, la grasa de cerdo ha sido utilizada durante siglos en diversas culturas culinarias, especialmente en países con tradición en la cría porcina, como España y muchas regiones de Latinoamérica.

Desde el punto de vista nutricional, la grasa de cerdo está compuesta mayormente por ácidos grasos monoinsaturados y saturados. Aunque debe consumirse con moderación, aporta energía y ayuda a absorber vitaminas liposolubles como la A, D, E y K.

En diferentes países de Hispanoamérica, la grasa de cerdo también es conocida por varios nombres, entre ellos manteca de cerdo, manteca, o simplemente manteca animal. Estos términos suelen usarse indistintamente en el contexto de la cocina.